Parecería que este paradigma
no presenta rechazo a nivel mental, al menos en la
sociedad occidental, sino un rechazo muy amplio
a
nivel práctico. Pero, en todas las partes del mundo
( a nivel de personas, familias, instituciones,
religiones...) queda mucho por hacer en este campo.
La postura que tome el
cristianismo respecto a este tema puede influir
bastante en la evolución tanto del porvenir de las
mujeres como del cristianismo. Es grande nuestra
responsabilidad.
Tiene pleno sentido que los
cristianos nos situemos dentro de la lucha feminista
y defendamos a nivel social y político la igualdad
de derechos, deberes y responsabilidades entre la
mujer y el hombre. Por ejemplo, tiene que ser nuestra la lucha por la igualdad salarial,
por evitar la violencia de género... Bien entendido
que feminismo implica igualdad de mujeres y hombres
en deberes, derechos y oportunidades. No revancha.
No estaría mal hacer
esfuerzos concretos por reescribir la historia
teniendo en cuenta el papel de la mujer
Sobre el lenguaje no
sexista, en verdad no lo tengo muy claro. Por
razones prácticas más que otra cosa. Lo mismo hay
que renovar mucho el lenguaje para que aparezcan las
dos dimensiones: femenina y masculina. De todas
formas debería ser una reforma del lenguaje muy
imaginativa para que no diera lugar a dificultades
de escritura, lectura, etc
Posiblemente los
cupos de
mujeres y hombres y las listas cremalleras en las
elecciones tengan sentido, al menos
provisionalmente, para atajar las grandes
diferencias de oportunidades entre mujeres y
hombres.
Cuando se habla de que las
mujeres puedan ejercer los ministerios dentro de la
Iglesia, se aborda sólo la mitad de la cuestión.
Creo que hace falta una "democratización del estilo
y de los hechos" de todas las personas dentro de la
Iglesia, que seamos una comunidad de hermanos y
hermanas. Entonces vendría como consecuencia lógica
el ministerio de las mujeres y de los hombres. Me parece que dentro de esta lucha tiene
sentido la petición de que las mujeres puedan ser
ordenadas y tengan las mismas responsabilidades
dentro de la Iglesia que tienen los varones
Sería útil releer la Biblia
y en particular el Nuevo Testamento desde una
perspectiva feminista, superando la visión machista
y patriarcal. En particular, parece que el
ministerio de las mujeres era muy normal en los
primeros tiempos del cristianismo. Si uno de los
criterios es volver a este cristianismo primitivo...
Ya hasta
la imagen de Dios
se está renovando a partir de estos planteamientos.
No Dios Padre, sino Dios Padre-Madre, siendo
conscientes de la limitación de estas imágenes. |